El 25 de noviembre de 1915, Albert Einstein presentó su teoría general de la relatividad, que se publicó el 2 de diciembre. Para marcar estas fechas, estamos destacando historias del archivo de The Economist que muestran cómo se recibió la teoría y el hombre detrás de ella. Aquí, consideramos uno de sus efectos, arrastrar cuadros.

Ciencia y Tecnología
ALBERT EINSTEIN fue responsable de algunas ideas bastante extrañas. Su teoría «especial» de la relatividad mostró que un objeto puede tener dos tamaños diferentes para diferentes personas, y que pueden percibir que el tiempo entre dos eventos tiene diferentes duraciones. Su teoría general de la relatividad sugirió que el espacio en sí mismo no es solo un escenario para que el mundo material actúe, sino que es un participante activo en la obra. El espacio, por ejemplo, se dobla fuera de forma por cualquier asunto que esté suspendido en él.
Sin embargo, una de las predicciones más extrañas de la teoría, ni siquiera se le ocurrió a Einstein. Se necesitaron dos austriacos, Josef Lense y Hans Thirring, para descubrir que, en teoría, una masa giratoria debería convertir el espacio a su alrededor en un remolino. Y solo ahora dos grupos de investigadores afirman haber encontrado la primera evidencia tentativa de que realmente lo hace.
EDITADO POR: ESMERALDA FRANCO RIVAS
https://www.economist.com/science-and-technology/1997/11/08/such-a-drag